En primavera preside nuestro cielo nocturno un gran triángulo formado por estrellas de las constelaciones de Boyero, Virgo y Leo. Es cierto que la climatología puede no acompañar demasiado y que no siempre son fáciles de localizar. Pero no desesperéis, la perseverancia siempre se ve premiada.
Para comenzar a dibujar nuestro triángulo debemos localizar una de las estrellas más visibles del cielo, Arturo, perteneciente a la constelación de Boyero. Para encontrarla solo debemos extender la curva de la cola de la Osa Mayor.