Esta exposición nos mostró el complejo mundo de la Percepción. Su finalidad era ayudar a la comprensión de los mecanismos que aseguran la coherencia entre los estímulos exteriores, procedentes de la realidad, y la percepción que tenemos de esta realidad una vez procesados. De esta coherencia depende que el mundo tenga un sentido para nosotros; se trata, en definitiva, de asegurar nuestra supervivencia y viabilidad como seres sensibles e inteligentes.
«Ver para no creer» era una exposición que fue cedida por la Fundación «la Caixa» al Museo y que continuaba en la línea de divulgación científica que ambas instituciones desarrollan. Nos propuso diversas ilusiones y paradojas perceptivas para entender como capta el cerebro el mundo que nos rodea. Se trataba de experimentos, casos límite de laboratorio en los cuales la información fue manipulada para ver cómo respondía el cerebro y de esta manera estudiar los mecanismos de la percepción.